30 de agosto de 2011

De Rusia con amor

Ilustración de título para "Marya Morevna" (1900)

Casi me averguenza decir que al pensar en Rusia, una de las pocas cosas que me vienen a la cabeza es un olvidado libro de James Bond, "De Rusia con amor", que leí hace ya bastante tiempo. Claro, aparte de las rubias despampanantes, el Kremlin, las matroskas (muñecas rusas, esas que se meten unas dentro de otras) y por supuesto, el vodka. Pero bueno, por lo menos creo que desde hoy podré recordar otra cosa.

De niño (y no tan niño) me gustaban mucho los libros de cuentos, no sólo los de dinosaurios y los de James Bond. Y tal vez me gustaban tanto por las ilustraciones que adornaban esos libros viejos y con cierto olor a moho, que además de darle rostro y cuerpo a los personajes servían como ventanas a reinos lejanos y desconocidos. Nunca he apreciado demasiado la ilustración infantil como la conocemos ahora, ese ejercicio más cercano a las artes plásticas que al dibujo como tal (razón por la cuál me resulta un poco ajeno), pero los cuentos ilustrados clásicos dejaron a más de un maestro que recordar. Y entre esos se encuentra el ruso Ivan Bilibin.

El mercader visita Tsar Saltan, ilustración de "El cuento de Tsar Saltan" (1905)

Bilivin nació en Tarkhovka, cerca a San Petersburgo (ciudad que seguramente sí hemos oido) en el año de 1876. Influenciado por el folclor eslavo, el arte medieval y el art noveau, que habia popularizado en Europa la estampa japonesa, Bilivin comenzó su carrera como ilustrador en 1899, ilustrando una serie de cuentos tradicionales Rusos por encargo del gobierno. Su trabajo fue prontamente reconocido, y lo llevó a vincularse al teatro y al ballet ruso, en donde elaboraba hermosos fondos para las obras y diseñaba con genialidad el vestuario de los personajes. Se mudó por unos años a Egipto, donde trabajó para una colonia griega, y luego se traslado a París, donde trabajo durante más de una década, para finalmente volver a Rusia. Murió en 1942 en Leningrado, durante el tragico sitio al que el ejercito alemán sometió a la ciudad durante la Segunda Guerra Mundial. Sin embargo su trabajo ha recorrido el mundo desde entonces, siendo la imagen del cuento ruso por excelencia, y su influencia puede verse claramente en muchas obras audiovisuales, de las que tal vez la más memorable para mí es la serie animada "Cuentos de los hermanos Grimm"(eso sí, salvando las diferencias geográficas, tanto de los cuentos como de los realizadores).

El Caballero Rojo de "Vassilisa la hermosa y la bruja Baba Yaga" (1900)

Es increíble ver el trabajo de Bilibín, gran parte realizado hace más de un siglo, y darse cuenta de lo vigente que sigue siendo. No sólo era un dibujante excelente, sino que era un verdadero maestro en el manejo de la línea y del color, sin hablar de sus composiciones y sus atmosferas, casi cinematográficas. El halo de nostalgia y de ensoñación que envuelve sus obras resulta incluso más evocador que los mismos cuentos en los que se inspira, dejándonos por un momento en medio inabarcables praderas, entre espesos bosques, en oceanos impregnados de la magia y el misterio de los siglos pasados. Sus dibujos son verdaderos tratados de ornamentación, con cientos de adornos y motivos que se funden con genialidad entre lujosos ropajes y pisos adoquinados, además de hacer parte de las hermosas composiciones con las que Bilibin enmarcaba sus obras.

El Caballero Negro de "Vassilisa la hermosa y la bruja Baba Yaga" (1900)

Para terminar dejo un par de links donde puede apreciarse algo de su obra, aunque por google pordemos encontrar sin mucha dificultad más de su trabajo, que tristemente se encuentra terriblemente disperso y desordenado. No he podido encontrar una sóla página donde se recopile toda su obra, o donde al menos se muestre parte de los libros de los que hacía parte; si alguien la encuentra y la deja por aquí, será más que bienvenido. Y ahora que recuerdo, de niño también vi alguna película, malísima de seguro, que se desarrollaba en Rusia y tenía a Schwazeneger de protagonista... Pero creo que eso sería material para otra entrada. ¡hasta la próxima!


Link 1 (Página en ruso inentendible, pero con una buena recopilación de imágenes)
Link 2 (recopilación de varios de sus impresionantes trabajos para teatro, entre otros)

20 de agosto de 2011

Pianos e inundaciones

  

Hace dos entradas mostraba el resultado de un peculiar ejercicio que hice junto con mi amigo Nelson Martínez (quién, cómo decía entonces, es uno de los mejores dibujantes que conozco) en el cual cada uno tomaba dos palabras al azar y hacíamos un dibujo del otro, en un estilo que definíamos previamente. Las mías fueron "ítem" y "contrato" y las de él "piano" e "inundación". Sobre estás líneas está su resultado, tan peculiar y bien hecho como siempre. Eso sí, si alguien logra entenderlo, por favor cuénteme, porque a mí no me quizo decir.

Don Nelson no sólo hace dibujitos, también los anima, y además muy bien. Les dejo su trabajo de grado "Terminal"  (en el cuál orgullosamente pude ayudar un poquito), un corto que nos habla de su pueblo natal (Málaga, Santander) en un ensoñador recorrido de luz y de recuerdos. Y cómo soy muy malo para las frases rebuscadas, mejor véanlo, que vale muchísimo la pena.


9 de agosto de 2011

Algo que contar

Antes de empezar a escribir, quería titular este post "palabras sobre el manga en Colombia", tema sobre el que quería hablar hace mucho tiempo. Sin embargo el título no tardó en parecerme inapropiado, no sólo porque no me encuentro en este momento en Colombia, sino porque además hace mucho que no hago cómic, y el mundo ya está demasiado lleno de gente que habla y critica sin tener siquiera autoridad moral para hacerlo. Así que preferí poner un título algo más humilde, y ahora que lo veo, también evocador, tal vez solo para recordarme que aún hay muchas cosas que valen la pena ser contadas.

6 de agosto de 2011

Razones para celebrar

Y es que aunque sean cosas que a nadie le importan, 458 visitas en el último mes (el mayor número que ha tenido este blog en su interrumpido año de existencia) son una buena razón para tomarse un buen vino y lazar voladores por la ventana. Pero en vista de que el vino se acabó con rapidez y la polvora es un poco complicada de conseguir en Buenos Aires, tuvimos que conformarnos con un cambio de imagen a manos de una profesional del diseño y de la tipografía, y a quién pueden encontrar unas cuantas entradas más abajo.  Por cierto, está estrenando página web (que pueden ver aquí) y si de casualidad alguno de los tres o cuatro que visitan este blog sabe de un buen trabajo en Capital Federal para ella, no dude en recomendarla.

El de arriba es mi colega y buen amigo Nelson Martínez, uno de los mejores dibujantes nóveles que conozco (y con un portafolio de los que hay que pasar a visitar) con el que recienteme realicé un ejercicio conjunto, cuyo producto pueden ver en la imagen. Y para evitar malentendidos, dejo claro que el es el de las gafas, no el de los cuernos.

Gracias por pasar por aquí y leer. Prometemos que las próximas entradas no serán producto de la fermentación de la uva ni de sustancias similares, y que por fín volvera a ver contenidos medianamente útiles, o eso intentaremos. ¡Hasta la próxima!